
En el Chapare, específicamente en el trópico de Cochabamba, han circulado panfletos en los que se amenaza de muerte a un supuesto narcotraficante vinculado a una serie de asesinatos ocurridos recientemente en la región. Estos panfletos, difundidos a través de redes sociales y distribuidos en las calles, incluyen detalles sobre Tomas M. R., quien sería el responsable de la muerte de una niña de 5 años y otros crímenes perpetrados por sicarios. Los folletos no solo condenan al individuo por estos actos, sino que también dejan claro que hay una «guerra» entre clanes de narcotraficantes luchando por el control de la producción de drogas en la zona.
El contenido de los panfletos es explícito y alarmante, advirtiendo a Tomas M. R. que no habrá tregua hasta que se entregue a las autoridades. La amenaza de muerte también se extiende a su familia, lo que refleja la gravedad de la situación en la región. Los panfletos no solo exponen el clima de violencia generado por el narcotráfico, sino que también muestran el deseo de estos grupos de actuar al margen de la ley, imponiendo sus propias sentencias de muerte sin intervención del sistema judicial.
Ante esta situación, los panfletos incluyen un llamado al ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, solicitando su intervención para evitar más muertes en medio de esta disputa entre narcotraficantes. El conflicto, aparentemente, ha escalado a niveles peligrosos, y la comunidad se encuentra atrapada en un escenario de violencia e inseguridad, que pone en evidencia los desafíos del Estado para garantizar la paz y el orden en esta región.